¿Para quién?
Sin duda, para todo el mundo. En una clase puede encontrarse gente de todas las edades. Lo mejor es que no importa el nivel ni el estado físico que tengas. Puedes empezar haciéndolo sin peso, sólo con la barra, e ir aumentándolo cuando vayas ganando fuerza y resistencia. De hecho, es una clase ideal para empezar si te acabas de apuntar a un gimnasio o llevas mucho tiempo sin hacer ejercicio.